Se me cierran las piernas.
Se me escapa el deseo.
Se me crispan las manos.
Se me mojan los agujeros,
de los ojos;
los otros se me secan.
No me mires.
No me toques.
No me enciendas.
No lo entiendes.
No quiero quererte
como antes.
Cuando me encuentres
te amaré.
Intersante como reflejas en las palabras la histeria - casi comun- en toda mujer cuando es objeto de deseo.
ResponderEliminar¿A qué te refieres con histeria?
ResponderEliminar